lunes, 26 de junio de 2017

-Yacimiento de Peñas Sacras de Gete (Pinilla de los Barruecos).

 Enlace: http://burgosconecta.es/2017/06/18/en-busca-del-pasado-celta-burgales-en-el-yacimiento-de-penas-sacras-de-gete/

Un equipo de quince personas, entre investigadores de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) y la Universidad de Burgos, apoyados por voluntarios del pueblo, volverá este verano a trabajar en el yacimiento arqueológico de Gete (pequeño pueblo perteneciente a Pinilla de los Barruecos). El objetivo es buscar evidencias que demuestren que la peña descubierta al finalizar la campaña de 2016 es una Roca Sacra, que se sumaría a La Peña y el Altar de los Tres Tronos, los otros dos santuarios célticos identificados en la zona.
Ignacio Ruiz, profesor de la UNED y coordinador del proyecto, ha recordado que la roca presenta muestras de acción humana, pero toca limpiarla para comprobar el alcance de las mismas antes de asegurar que se trataría del tercer santuario. Una vez más, la casualidad ha jugado a favor de la historia, pues La Peña y el Altar de los Tres Tronos también se encontraron circunstancialmente, cuando vecinos de la zona (uno de ellos, una alumna de Ruiz), detectaron evidencias antrópicas en estas inmensas rocas.

En la foto se ven las escaleras de acceso al altar. BC

Las peñas presentan oquedades realizadas por la mano del hombre, lóculos a modo de ventanas; también retranqueos y accesos subsidiarios, así como escaleras, si bien este caso se trataría de elementos añadidos en época romana, lo que demuestra a su vez que los santuarios conservaron su carácter religioso más allá de la época celta. Los investigadores han trabajado en el yacimiento en 2015 y 2016, limpiando La Peña y el Altar de los Tres Tronos, en busca de epigrafías o grabados, aunque sin éxito.
Eso sí, la investigación sigue en marcha, aunque este año se vayan a centrar en esa posible tercera roca sagrada. Ignacio Ruiz ha recordado que Gete se ubica en una zona de paso entre el Alto Arlanza y el Alto Duero, así que es un lugar sagrado, como bien ponen de manifiesto la existencia de eremitorios de la Edad Media o antiguas necrópolis, como la de Regumiel de la Sierra. Era vía de comunicación en la Edad del Bronce, en la Edad del Hierro y también en época romana, con asentamientos de población permanentes.


Imagen del Altar de los Tres Tronos. BC

El profesor de la UNED ha recordado que los celtas, de ahí que sus asentamientos se dividiesen en los castros (poblados amurallados para separarse de la naturaleza, el mundo espiritual) y los lugares sagrados en los que se manifestaban los dioses. Esos lugares podían ser cuevas, claros en el bosque, lagunas o rocas, como en el caso de Gete, y en muchas ocasiones han conservado su carácter religioso. Los romanos los reconvirtieron, y también los cristianos, que ubicaron algunas de sus ermitas en zonas con reminiscencia de altares célticos.
Si hablamos del yacimiento de Gete, las investigaciones apuntan a que La Peña sería una roca de sacrificio y lugar de reunión, en el que los pueblos celtas celebraban comidas colectivas y cerraban negocios. Sería una transposición de las romerías católicas, ha afirmado el profesor.  Mientras, el Altar de los Tres Tronos es un ejemplo paradigmático de santuarios celtas de tres, cinco o siete tronos, un tipo de lugar sagrado que está poco estudiado, así que poco se sabe de su simbolismo religioso. Podrían ser altares de ofrenda, pero no se sabe con exactitud.
La campaña de excavaciones se realizará durante la segunda semana de agosto, aunque algunos trabajos podrían comenzar en julio. El proyecto cuenta con la colaboración económica de la Diputación y de la Fundación Caja Rural. Ruiz ha recordado que la investigación en Gete forma parte de un proyecto, más amplio, coordinado por el arqueólogo e historiador Martín Almagro, para descubrir el pasado celta de España y Portugal, uno de los menos estudiados en la época contemporánea.

domingo, 25 de junio de 2017

-Se retoman las excavaciones en el asentamiento judío de Castrillo Mota de Judíos.


Enlace: http://burgosconecta.es/2017/05/28/se-retoman-las-excavaciones-en-el-antiguo-asentamiento-judio-de-castrillo-mota-de-judios/ 
 El equipo de investigadores encabezado por María Negredo y Ángel Palomino retoma esta semana las excavaciones en el yacimiento arqueológico de La Mota, el antiguo asentamiento judío que dio origen al actual Castrillo Mota de Judíos. La tercera fase del proyecto supondrá actuar en el sector seis, en el que ya se trabajó el pasado año, con el objetivo de completar la documentación relativa a los retos de un edificio significativo hallado junto la calle empedrada, en torno a la cual se estructuraría la trama urbana.


Retoman excavaciones en el antiguo asentamiento judío de Castrillo Mota de Judíos Palomino ha recordado que, si bien el sector seis tiene una extensión mínima de 180 metros cuadrados, teniendo en cuenta que el yacimiento ocupa 7 hectáreas, se trata de una zona con  mucha información. E el sector en el que se identificó mayor número de evidencias domésticas significativas cuando en 2014 se realizaron los sondeos. Además, en las excavaciones realizadas el pasado año se descubrieron edificaciones domésticas, la calle empedrada y evidencias de calles adyacentes, espacios de almacenamiento y numerosos materiales cerámicos.
Se han encontrado numerosas evidencias de construcciones domésticas, de almacenamiento y vías públicas
El objetivo ahora es continuar recabando información que permita saber a qué corresponde esa construcción levantada con muros de adobe y tapial que flanquea la calle empedrada. Se trata de un edificio complejo, con varios compartimentos, incluido un silo de almacenamiento de grano, así que se le presupone cierta entidad. Cierto es que se hablado de la existencia de una antigua sinagoga, pero Palomino es muy prudente y recuerda que “faltan datos para poder confirmar el supuesto”.
En las excavaciones se seguirán recuperando materiales de uso doméstico como los encontrados hasta el momento, realizados principalmente en cerámica común, si bien se han hallado algunos con diseño mudéjar y esmaltados. Del mismo modo, el arqueólogo recuerda uno de los grandes hallazgos del pasado año, los fragmentos del candil múltiple o hanukiyá, lámpara de ocho receptáculos, siete de ellos para mecha y aceite y otro más auxiliar, empleadas para la celebración de la Fiesta de las Luces judía o Hanuká, en la que los niños son protagonistas.
El arqueólogo ha asegurado que, si bien queda mucho trabajo por hacer, la investigación realizada hasta el momento permiten saber que el asentamiento estaba perfectamente estructurado, y que no se levantó de manera improvisadamente, a pesar de que solo estuvo ocupado 300 años. Se organizaría en forma de terrazas, aprovechando de este modo el cerro, y se ha detectado un área residencial con edificios de dos alturas, además de espacios públicos y sistemas de construcción. También esa calle empedrada y la evidencia de otras adyacentes.
Hay mucha cerámica doméstica, común, esmaltada y mudéjar, y alguna pieza religiosa como la Hanukiyá
La tercera fase de las excavaciones contará con un presupuesto de 60.000 euros, aportado por la Junta de Castilla y León (30.000), la Diputación de Burgos (20.000) y el Ayuntamiento (10.000). El objetivo último es recuperar el asentamiento judío y ponerlo en valor, como un recurso cultural y turístico dentro del proyecto de Castrillo Mota de Judíos de recuperar su pasado sefardí, iniciado tras el cambio de nombre en 2014. Es un proyecto “ambicioso” que incluye el centro de interpretación de la cultura sefardí, cuya construcción podría iniciarse en 2018.
El yacimiento de La Mota corresponde al antiguo asentamiento judío de los siglos XI a XIV. Se creó en 1035, cuando la comunidad judía fue desplazada del vecino Castrojeriz, a raíz de un enfrentamiento con el rey Fernando I de Castilla. Los judíos ocuparon el cerro de La Mota y estuvieron allí hasta el siglo XIV, puesto que en 1311 se les permitió volver a Castrojeriz. El asentamiento tuvo por nombre Castrello, que evolucionó a Castriello, y el pueblo actual se fundó tras la partida de los judíos bajo el nombre de Castrillo de Judíos. Sin embargo, en el siglo XVI sufrió una transformación y pasó a Castrillo Matajudíos. Ahora Castrillo recupera sus orígenes con ese Mota de Judíos.

sábado, 24 de junio de 2017

-Estelas de San Vicente del Valle.






























-Nuevas experiencias turísticas en Atapuerca.

 Enlace: http://www.antena3.com/noticias/ciencia/atapuerca-permitira-visitantes-disfrutar-cueva-hace-dos-millones-anos_20170529592c4dc50cf279bfc3b4a04f.html

Investigadores en AtapuercaLos yacimientos de la sierra de  Atapuerca (Burgos) sumarán en junio dos nuevas experiencias turísticas, una de las cuales permitirá la visita a la cavidad kárstica Cueva Peluda, de hace dos millones de años, a fin de que el visitante conozca de primera mano cómo vivían nuestros antepasados en la sierra burgalesa.
La visita Atapuerca Espeleo ofrecerá la posibilidad de conocer el interior de una cueva natural de la Trinchera del Ferrocarril, ha informado la Fundación Atapuerca.
En Cueva Peluda, el visitante podrá experimentar cómo vivían sus antepasados en las cavidades de la sierra de Atapuerca, disfrutando además del espectáculo natural de una cavidad kárstica.
La visita a la cueva, que está adaptada a personas con movilidad reducida, y es sólo apta para aquellos que no sufran claustrofobia, complementa la visita turística actual a los yacimientos.
A ella se sumará también Atapuerca Natural, un paseo guiado por el sendero botánico que rodea los yacimientos y que muestra el rico entorno natural de la sierra de Atapuerca.
El recorrido servirá para aprender un poco más sobre la fauna y la flora que han marcado el paisaje de la sierra burgalesa desde la Prehistoria hasta la actualidad. En este caso, la propuesta no es apta para personas con movilidad reducida, pues transcurre por un entorno natural y abierto.
Estas nuevas experiencias turísticas se podrán disfrutar todo el año y a un precio de ocho euros para Atapuerca Natural y de diez euros para Atapuerca Espeleo sólo en junio y julio.
Además, los monitores de la Fundación Atapuerca están recibiendo formación específica de la mano de Miguel Ángel Pinto, director del Aula de Medio Ambiente de Caja de Burgos, para Atapuerca Natural.
En Atapuerca Espeleo, la encargada de la formación es la geóloga y espeleóloga Ana Isabel Ortega, investigadora postdoctoral de la Fundación Atapuerca y miembro del Grupo Espeleológico Edelweiss.

viernes, 23 de junio de 2017

-Nueva campaña de excavaciones en Atapuerca.


 Enlace: http://www.elcorreodeburgos.com/noticias/burgos/atapuerca-ataca-nivel-superior-busca-sapiens-mas-antiguos_153461.html

Un grupo de investigadores trabaja en los yacimientos. - RAÚL G. OCHOAArranca una nueva campaña de excavaciones en la sierra de Atapuerca en el que se empieza a perfilar el futuro del trabajo del Equipo de Investigación de Atapuerca (EIA). Pero no rebuscan en lo más antiguo sino en las cronologías más modernas. Ahora se mira a la parte superior del karst donde hace tres años se analizaron las posibilidades de Cueva Fantasma, con excelentes resultados, ya que ha dado, casi sin buscar, restos de lo que «todo indica» podría ser neandertal. Se trabaja para preparar este yacimiento a la excavación pero «los fósiles prácticamente afloran con lo que tenemos que trabajar con maquinaria pesada pero con cuidado», señaló en la presentación de la campaña el codirector, José María Bermúdez de Castro.

No será el único yacimiento. En la parte superior del sistema, ya vallado en algunos accesos que hasta hace dos años no estaban delimitados, se podían ver un metro desplegado o estaciones de medición y mapeado. «Vamos a realizar seis sondeos geofísicos desde el valle de la Propiedad hasta Cueva Mayor porque estamos cambiando el nivel de interés de los yacimientos», explicó Eudald Carbonell. «Estamos saliendo de la Trinchera, prospectando los techos de Cueva Fantasma y salidas de Estatuas y empalmaremos una línea suprior de 10 a 20 metros por encima de la Trinchera donde vamos a seguir trabajando también», señaló el codirector de las excavaciones. De esta manera, tal y como avanzó, en unos cinco o diez años «veréis en la zona del sistema superior los techos que cubrirán las zonas de excavación», detalló.

El objetivo es encontrar al primero de los sapiens. El hombre moderno más antiguo. Algo para lo que ya hay dos yacimientos con papeletas para encontrarlo: Cueva del Mirador y Cueva Mayor. Son los dos yacimientos de cronologías más modernas que se han estado excavando en la última década. «Estos yacimientos de sapiens están llenos de civilizaciones romanas, neolítico pero buscamos un sapiens antiguo (40.000 años) para tener algo que no hay en ningún otro yacimiento: una ocupación sistemática de todas las especies posibles desde hace 1,5 millones de años hasta hoy», apuntó Carbonell.

En el complejo karstico de Atapuerca se han llegado a localizar medio centenar de cavidades además de los yacimientos al aire libre de los que se han determinado zonas de uso por parte de neandertales de hectáreas con lo que «entonces hubo una ocupación sistemática». Pero los fósiles humanos de neandertales se han hecho esperar hasta ahora. El parietal que se localizó el año pasado en Cueva Fantasma. «Todo apunta a que es neandertal pero aún nos faltan dataciones que hicimos el año pasado y microfauna para terminar de determinarlo», señaló José María Bermúdez de Castro.

Hasta ahora había presencia humana en forma de fósiles recuperados de hace 1,3 millones de años (mandíbula SP en Sima del Elefante), 900.000 años (Antecessor en el nivel TD-6 de Gran Dolina), 400.000 años (preneandertales de la Sima de los Huesos) y humanos modernos. Contar con los primeros sapiens es un reto que persiguen para el futuro de Atapuerca.

El yacimiento que abre ese futuro inmediato es Cueva Fantasma donde este año se trabaja por tercera vez. El objetivo es analizar la parte contraria al año pasado, donde ya se localizaron los restos con sedimento, arena rojiza. En el lado izquierdo se ha encontrado gran roca que es un espeleotema que da idea del techo de la cueva. «Es tan grande que todo indica una gran profundidad», señaló al respecto el responsable del área de datación, Josep María Parés. Recuerda que en el sondeo de la zona izquierda se alcanzaron los 12 ó 13 metros de profundidad. Con este trabajo se trata de conocer si las entradas del material a la cueva son las mismas o diferentes.

«En esta campaña hay muchas labores de limpieza, empezamos con máquinas para retirar los restos de cantera y dejar todo preparado para ver si el próximo año la Junta de Castilla y León, que ya se ha comprometido a ello, puede cubrir el yacimiento para preservarlo de los rigores climáticos y si todo está a punto para la próxima campaña podremos empezar con los sondeos», señaló Bermúdez de Castro. También se llevan a cabo trabajos de geofísica del relleno y extracción mecánica. El objetivo es hacer una reconstrucción en 3D de la cavidad antes de vaciarlo para lo que interesa mucho saber las entradas del material.

-Charlas de historia en San Vicente del Valle.